La agricultura es una de las actividades más antiguas que desarrolla la humanidad. Su evolución ha pasado por miles de años, aprovechando diferentes tecnologías para el respeto de la planta, para garantizar su salud y su crecimiento integral. Adicionalmente, estos mecanismos buscan maximizar la productividad de la plantación, y dependiendo del peligro hay al menos un método para proteger los cultivos.

Metodos de protección

El primer factor para proteger los cultivos es conocer las mejores condiciones para la siembra dependiendo de la planta. Los frutales, los ornamentales, las flores, todos son organismos vivos que requerirán alimentación, hidratación, exposición al sol y protección contra las inclemencias del tiempo, el clima, y los depredadores.

La adecuada hidratación, método para proteger los cultivos

La tecnificación del riego logró que los cultivos de alimentos se extendieran en áreas muy grandes, haciéndolos más efectivos y produciendo toneladas de productos al año. Hay múltiples formas para llevar el agua hasta los cultivos, desde sistemas artesanales con tuberías perforadas, hasta regadíos tecnificados que se activan cada cierto tiempo, así como regulan la cantidad.

La rotación, otro método para proteger los cultivos

Hay cultivos que se pueden repetir en el mismo sitio, pero para algunos es necesario rotarlos. Retirar la hierba mala, remover la tierra, nutrir el suelo y rotar las plantas de posición son un buen método de protección, porque el sustrato será más fértil. Además, este movimiento permitirá prevenir la aparición de plagas. 

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Insecticidas como método para proteger los cultivos

El extracto de neem es uno de los más versátiles como base para la preparación de insecticidas. Combinado son canela, ajo, cedro, casia y otras, permitirá mantener lejos a ciertas colonias de insectos que pueden volverse parasitarias, afectando terriblemente a las plantas y a los frutos. 

Método para proteger los cultivos contra las heladas

Una frecuente amenaza de los cultivos en países templados es la aparición de heladas. Las bajas temperaturas extremas afectarán a la planta, quemándola y evitando su crecimiento y productividad. Los acolchados térmicos y el riego por aspersión suelen ser los más comunes y efectivos, pero también se pueden utilizar químicos protectores que protegen la planta hasta ciertas temperaturas, y mantener el suelo libre de cualquier sucio y maleza.

Biostick el mejor coadyuvante para proteger cultivos

Bio stick  es un coadyuvante que favorece la efectividad de las mezclas. Sus aceites vegetales forman una película alrededor de los ingredientes activos encapsulándolos y protegiéndolos de la degradación por efecto de factores adversos, prolongando su persistencia y acentuando su efectividad biológica. Proporciona condiciones favorables en las soluciones de aspersión que contienen microorganismos benéficos, les provee humectación y evita su deshidratación durante la aspersión en campo, promoviendo su establecimiento y actividad inicial en las plagas blanco.

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